Mi nacimiento ritual.
Mi visión está confusa, pero haré un esfuerzo por describirla.
Hay dos demiurgos en torno a una mesa cuadrada. Beben en cuencos aguas negras junto a una cruz marmórea. El uno de tupidas barbas oscuras, porta sombrero extranjero sobre su cabeza. El otro, de aspecto inhumano, sostiene diminutas vidrieras ovales sobre sus ojos. Humo de tabaco holandés perfuma la estancia. Colgado en un muro lateral, un lienzo vívido de campos verdes sembrado de seres diminutos de colores intensos enzarzados en una absurda batalla. Una voz exaltada y extraterrenal de léxico incomprensible emana de las paredes, mezclándose con ruido de monedas. Largas velas cenitales iluminan la estancia con fulgores de relámpago. Risotadas mientras todo se funde a ocre.
Mi visión está descrita, pero haré un esfuerzo por confundirla.
Hay dos demiurgos en torno a una mesa cuadrada. Beben en cuencos aguas negras junto a una cruz marmórea. El uno de tupidas barbas oscuras, porta sombrero extranjero sobre su cabeza. El otro, de aspecto inhumano, sostiene diminutas vidrieras ovales sobre sus ojos. Humo de tabaco holandés perfuma la estancia. Colgado en un muro lateral, un lienzo vívido de campos verdes sembrado de seres diminutos de colores intensos enzarzados en una absurda batalla. Una voz exaltada y extraterrenal de léxico incomprensible emana de las paredes, mezclándose con ruido de monedas. Largas velas cenitales iluminan la estancia con fulgores de relámpago. Risotadas mientras todo se funde a ocre.
Mi visión está descrita, pero haré un esfuerzo por confundirla.
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